No está siendo una temporada para el recuerdo la que está protagonizando Phil Mickelson. De los 13 eventos que ha disputado hasta la fecha tan solo ha podido finalizar tres entre los diez primeros (Masters de Augusta, St. Jude Classic y Wells Fargo; segundo, tercero y cuarto, respectivamente).
Además, sufrió un duro varapalo en Chambers Bay, donde acabó en el T64 con 13 golpes por encima del par, un torneo en el que tenía depositadas muchas esperanzas para conseguir, por fin, el tan ansiado Grand Slam. Sin embargo, el fin de semana fue nefasto y acabó diciendo adiós antes de lo esperado.
Desde entonces –tres semanas han pasado ya del final del US Open– no hemos vuelto a tener noticias de él, al menos en cuanto a temas deportivos se refiere. Porque no hay que olvidar que Lefty se encuentra en el ojo del huracán por unas informaciones que le vinculan con una trama de apuestas ilegales y blanqueo de dinero –unos 3 millones de dólares–, algo sobre lo que el miércoles habló en la rueda de prensa previa al Abierto de Escocia.
“La gente va a decir sobre mí cosas buenas; va a decir cosas malas; va a decir cosas verdaderas; va a decir cosas que no son ciertas. Eso no depende de mí. Lo que sí que tengo claro es que estoy a gusto tal y como soy como persona y no necesito hacer comentarios sobre cada pequeño informe que aparezca”, afirmó el golfista de San Diego, que pareció sentirse molesto por las continuas preguntas de los periodistas sobre el tema.
Después de unos momentos de tensión por parte de ambos bandos las aguas volvieron a su cauce y el estadounidense aprovechó la ocasión para expresar la gran satisfacción que tenía al poder volver a Escocia, una tierra que le trae muy buenos recuerdos, pues fue aquí donde consiguió la Jarra de Clarete en el año 2013: “Voy a pasar por Muirfield. Me encantaría pisar los últimos nueve hoyos de nuevo. Es un lugar muy emotivo para mí porque aquí logré la victoria más especial de mi carrera. Tener este santuario tan cerca y no ir sería un crimen. Así que sí, definitivamente daré una vuelta por Muirfield”, sentenció el jugador de 45 años.
Esperemos que este hecho no le distraiga y que pueda coger ritmo competitivo para el British, que arranca en menos de una semana.