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Darren Clarke y Jeev Milkha Singh. Foto: @asiantourgolf
Puede que la EurAsia Cup no goce de la solera y la reputación con la que cuenta la Ryder –no en vano tan sólo ha tenido lugar una edición hasta la fecha-, pero es un torneo internacional que puede abrirle, más aún, las puertas al golf en el continente asiático.
Sólo hay que ver la revolución que ha provocado la Presidents Cup en los últimos años, donde se ha llegado hasta el punto de que Corea del Sur sea la próxima sede dentro de dos semanas, algo impensable hace apenas una década. Es por esto que los europeos quisieron imitar a sus homólogos estadounidenses y comenzaron a engendrar un campeonato que vio la luz por primera vez en marzo de 2014.
Aquí, el malagueño Miguel Ángel Jiménez tuvo la oportunidad de ponerse al frente de un equipo europeo cargado de talento. Graeme McDowell, Pablo Larrazábal, Fernández-Castaño o el francés Victor Dubuisson fueron sólo algunos de los integrantes del viejo continente, que consiguió empatar a 10 sobre la hierba del Glenmarie Golf and Country Club de Kuala Lumpur (Malasia) ante un combinado asiático capitaneado por Thongchai Jaidee, que contaba con Lahiri, Aphibarnrat y el propio Jaidee como máximos estiletes.
Pero la primera edición ya quedó atrás. En tan sólo tres meses y medio (15-17 enero), y teniendo de nuevo el Glenmarie GC como sede, Europa tiene la oportunidad de resarcirse del empate y conseguir su primera EurAsia Cup y, dicho sea de paso, preparar la importante cita que tendrá lugar en el Hazeltine de Minnesota en el próximo otoño.
Y es que el norirlandés Darren Clarke ha sido designado capitán europeo para el evento euroasiático, al igual que en la Ryder Cup, un hecho que demuestra la ambición de Europa, que quiere preparar con las máximas garantías su desembarco en Estados Unidos el mes de septiembre.
Frente a Clarke, un viejo amigo: el indio Jeev Milkha Singh, para el que el europeo tuvo unas palabras de cortesía: “Estoy convencido de que los dos equipos pelearán con todas sus fuerzas por hacerse con la EurAsia Cup por primera vez. Cuando lleguemos a Malasia, Singh intentará patear mi trasero, pero yo estaré atento e intentaré patear el suyo. Nos conocemos desde hace mucho tiempo y seguro que será una semana fantástica”.
