Estados Unidos está feliz tras la consecución de su novena Presidents Cup. Un triunfo sobre la bocina siempre sabe mejor, y más teniendo en cuenta los sinsabores de las últimas ediciones de la Ryder Cup, donde Europa le tiene tomada la medida.
De las siete ediciones disputadas en este siglo los norteamericanos tan sólo han podido conquistar una –el año 2008, en el Valhalla de Louisville, Kentucky-. El combinado del viejo continente acudirá el próximo año al Hazeltine National Golf Club con la ilusión de ser el primer conjunto de la historia en sumar cuatro triunfos consecutivos, aunque Estados Unidos lleva tiempo preparando la estrategia para impedirlo. Y Tiger Woods forma parte de ella.
¿Cómo? ¿Tiger? Si todavía no conoce si podrá participar, pensarán. Es más, el californiano lo tiene complicado para poder clasificarse de manera directa mediante su participación en los distintos torneos –atendiendo a sus resultados en los últimos tiempos- y a buen seguro sería una sorpresa que fuese seleccionado por Davis Love III como uno de las apuestas del capitán. Esto lo tiene en cuenta el ex número uno del mundo. Por ello, Woods está sondeando la posibilidad de participar en la Ryder Cup ¡como vicecapitán!
Sí, han leído bien. Según un artículo publicado por la revista Golf Digest, Tiger quiere estar en Hazeltine a toda costa y Davis Love III le ha abierto la puerta a una posible incorporación al equipo de trabajo estadounidense. Es más, durante el pasado fin de semana los contactos entre ambos fueron constantes mientras se disputaba la Presidents Cup, tal y como reconoció el capitán norteamericano: “Él estaba viendo el campeonato en casa y me llamó. Me estuvo comentando todas las cosas que tendríamos que hacer para derrotar a los europeos. Tenía un montón de ideas. Estamos planificando muchas cosas para el próximo año, y es genial. Todos queremos levantarnos cuanto antes del golpe de hace un año en Gleneagles”.
Si a esto le sumamos la voluntad aparente de Tiger en acoger bajo su ala a los nuevos valores del golf norteamericano como Jordan Spieth, Rickie Fowler o Brooks Koepka, estamos ante un asistente que podría serle de gran ayuda al conjunto de las barras y estrellas para poder recuperar la corona.