Realmente cruel fue la madre naturaleza este pasado sábado con el Ironwood Golf Course, recorrido localizado en la localidad estadounidense de Byron Township en Michigan. Y si no que se lo pregunten a la familia Bradley que vio como en un lapso de cinco minutos un tornado pasaba por sus instalaciones devastándolas.
A medida que el tornado se alejaba y el tiempo despejaba se podía apreciar el rastro de destrucción dejado. Árboles arrancados de cuajo, escombros por todo el recorrido y daños en todos y cada uno de los 18 hoyos son algunos de los destrozos causados.
Esta no es la primera vez que el campo tiene que cerrar a causa de la naturaleza, ya en 1998 unos fuertes vientos obligó al campo a cerrar durante más de una semana. Esta vez, dijo la propiedad, los daños son probablemente diez veces más importantes.





