Alfredo García-Heredia se ha consolidado en lo más alto de la clasificación del Campeonato de España de Profesionales Masculino 2019 con una nueva lección de consistencia, solidez y acierto con el putt, especialmente en sus segundos nueve hoyos. Tras la segunda jornada, el asturiano se ha situado en -13 y con una exigua renta sobre el malagueño Ángel Hidalgo, que ha firmado la tarjeta del día, un estratosférico 63 golpes.
Ambos compartirán partida este sábado, y si las cosas siguen por el mismo curso que en la segunda jornada, el espectáculo puede ser sublime. Puede serlo porque Alfredo García-Heredia se está mostrando en ‘modo martillo pilón’, es decir, cumpliendo en todo momento el ABC del golf: ir recto, cazar greenes y patear bien. Y puede serlo porque Ángel Hidalgo se está acercando en esta parte de la temporada al gran jugador que ha sido como amateur.
Al revés que en la primera jornada, Alfredo García-Heredia sí ha sufrido los rigores de un bogey, solo uno en 36 hoyos, pero en su vuelta los aciertos han sido muchos más que los errores. Después de un arranque errático, el gijonés se ha anotado cinco birdies en los segundos nueve hoyos que han dado como resultado un -6 en el día. Difícil mejorar sus prestaciones en estos dos días de juego.
A la sombra del golfista asturiano se ha plantado Ángel Hidalgo (-11) con la mejor actuación de lo que llevamos de competición. El golfista del Pro Spain Team quiere cerrar su primer año como profesional con algo grande, ya sea un salto al European Tour o una victoria de campanillas en Logroño, y calidad le sobra para lograrlo.
Siete birdies y un genial eagle al 18 para 63 al total le han acercado ligeramente al récord de su paisano Miguel Ángel Jiménez (60), el espejo en el que debe mirarse si quiere aspirar a destapar el champán -el vino, mejor dicho en esta tierra- en la sobremesa del domingo.
Pol Bech (-10) y Jacobo Pastor (-9), jugadores con una larga vinculación en el Campeonato de España de Profesionales, tienen trabajo este fin de semana: meter en problemas a Alfredo García-Heredia. En la segunda jornada ambos se han asentado en el Top 5 de la clasificación, si bien sus sensaciones en Casa Club han sido muy diferentes.
El barcelonés, -5 en el día, firmaba tarjeta con una sonrisa de oreja a oreja. “Llevaba bastantes días sin jugar, pero me estoy encontrando genial, pateando muy bien y con mucha soltura con los hierros. ¡En la primera jornada hasta metí dos desde fuera de green!”, exclamaba Bech, que accedió al torneo a través de la previa clasificatoria.
Por su parte, Jacobo Pastor, -3 en el día, llegaba al área de recogida de tarjetas con la sensación de haber perdido parte del gran trabajo hecho durante los dos días. “No había hecho ni un bogey en los 32 primeros hoyos y en los cuatro últimos me han caído dos y un doblebogey muy doloroso en el último”, decía resignado. Aún con este final, que nadie dude que el madrileño estará arriba el fin de semana.
También van a seguir disfrutando del golf en los próximos dos días veteranos que, como el buen vino de Rioja, con los años no empeoran, sino al contrario. ¿Ejemplo? Carlos Suneson, ganador en 2007, que pinchará bola este sábado con -7. Carlos Balmaseda (-6), Carlos García Simarro (-3) -sí, la cosa va de Carlos- o Vicente Blázquez (-3) también pueden tener cosas que decir el fin de semana partiendo con la vitola de tapados.
Otro ‘viejo rockero’, Miguel Ángel Martín, dejó otra de las estampas del día en esta jornada de corte, que ha estado en +2. El onubense se veía fuera del fin de semana con +4 en el tee del hoyo 18, pero decidió que no quería volverse tan pronto a casa. Se sacó de la manga un genial eagle que le ha metido en el grupo de cincuenta golfistas aún activos.