La semana pasada aparecieron un par de cocodrilos de más de cuatro metros en otros tantos campos de los Estados Unidos que sembraron, al menos, el respeto de los jugadores presentes en el campo.
Del primero que dimos cuenta surgió de las aguas del lago de Myakka Pines en Florida, mientras que el segundo paralizó el juego de forma momentánea para que el animal cruzara la calle en el Valspar Championship del PGA Tour.
Ahora nos llegan noticias desde Texas donde el superintendente del Deerwood Club en Kingwood se dio un susto de muerte mientras cambiaba las banderas del recorrido. En una de sus tazas, concretamente en el hoyo 12, se encontró esta serpiente asomando la cabeza por uno de los agujeros de su base, inmediatamente subió la foto a su cuenta de Twitter. Nuestra recomendación: mirar antes de coger la bola.
Yep not changing this cup today!! #hatesnakes pic.twitter.com/dXVJzNsLCu
— Ed Martinez (@emar7236) marzo 13, 2015