Hace sólo una semana el golfista inglés daba el susto en las redes sociales al publicar una foto suya con el dedo meñique de su mano izquierda repleto de puntos de sutura. Jamie Donaldson tuvo un percance con una motosierra mientras estaba realizando unos trabajos de jardinería en su casa y a punto estuvo de costarle caro.
Este desafortunado contratiempo le supuso, además del dolor, la ausencia en el Abu Dhabi HSBC Golf Championship, un evento que ganó en 2013 y que este año contó con la presencia de caras conocidas del golf mundial como Rory McIlroy o los estadounidenses Jordan Spieth y Rickie Fowler, quien finalmente se alzó con el triunfo.
Sin embargo, Donaldson ya está trabajando para poder estar presente esta próxima semana en el SMBC Singapore Open, evento perteneciente al circuito asiático dotado con un millón de dólares en premios y del que también formará parte Spieth. De hecho, a través de su cuenta de Twitter, el deportista británico colgó una foto en la que declaraba que estaba «avanzando«. «Todo va mucho mejor, ya puedo hacer el swing completo. Eso sí, sin bolas por medio aún«, puntualizó Donaldson.
El actual número 50 del mundo, que ya ha recibido el visto bueno por parte del especialista Mike Hayton, podrá estar presente en Singapur siempre y cuando su estado de salud le permita dar el cien por cien dentro del campo, pues quiere arrancar este 2016 con paso firme para asegurarse su segunda participación consecutiva en la Ryder Cup que arrancará en septiembre en el Hazeltine National.
No es la primera vez que un golfista tiene un problema con una motosierra. En 2014 el ex número 1 del mundo Greg Norman ya sufrió un percance similar mientras talaba madera y le provocó lesiones en los nervios de su mano izquierda. Es por esto que el tema fue una de las comidillas en Abu Dhabi.
Tanto fue así que hasta Henrik Stenson, compañero de Donaldson en Gleneagles, tuvo que responder ante los medios si él también contaba con una motosierra en su casa: «¿Por qué? ¿Tienes algunos árboles y me necesitas para cortarlos?«, respondió al periodista. «Solía cortar leña cuando era joven y tuve un par de sustos con el hacha. Es muy divertido porque haces algo diferente y te sientes fuerte, pero puede ser peligroso. Hemos tenido un par de compañeros que pueden dar fe de ello«, sentenció. Y no le falta razón.