El estadounidense Sammy Schmitz acaba de ganar el título en el U.S. Mid-Amateur Championship- con un albatros (hoyo en uno en un par 4) en la final, nada menos-.
Con su victoria, Schmitz, se ha hecho un hueco para participar el próximo año en el Masters de Augusta. Ahora, este hombre que trabaja en la industria de la salud podrá practicar todo el invierno, si así lo estima oportuno, sobre la moqueta del Augusta National Golf Club, un privilegio al alcance de pocos.
Pero hay un problema. Schmitz vive con su mujer y sus dos hijas en River Falls (Wisconsin), a 18 horas en coche y a cuatro en avión del campo donde tendrá lugar el The Masters 2016. Esto para un trabajador normal es un fastidio. El coste de los desplazamientos y la estancia hasta allí podría condicionar la economía familiar. En otros tiempos esta familia habría sacado la gorra a la calle y habrían comenzado a vender galletas y rifas para sacar algo de dinero para la financiación de su entrenamiento en Augusta.
Sin embargo, vivimos en la época de Internet y el crowfunding se ha hecho tan popular que ahora es extraño ver algún proyecto que no tenga este tipo de iniciativas para que la gente pueda colaborar aportando la cantidad que desee. Esto es lo que debió pensar Natalie Schmitz, la esposa de Sammy, que inició en la página GoFundMe una propuesta para ayudar a su marido a conseguir el dinero necesario para preparar con garantías el primer Grande de la temporada.
El proyecto, que recibe el nombre de A Golf Amateurs Dream Come True –El sueño de un jugador de golf amateur hecho realidad- tiene como objetivo recaudar la cifra de 30.000$, que se destinarán a los viajes y al alojamiento de la familia Schmitz tanto durante la disputa del Masters como en los entrenamientos previos, cuando Sammy se encamine por primera vez al que será su lugar de preparación hasta abril.
“Ser padres de dos hermosas chicas y tener cuentas y gastos diarios ha hecho muy difícil encontrar algún ingreso con el que Sammy pueda cumplir su sueño”, escribió Natalie en la propia página de GoFundMe. “Al ser enfermera, las horas extra que puedo hacer son bastante limitadas, por eso necesitamos la ayuda de todos ustedes para enviar a mi marido a The Masters”.
Y, de momento, no le va nada mal. El proyecto se puso en marcha el domingo y, desde entonces, ha recaudado 16.367$, más del 50 por ciento de lo que se habían propuesto. Todo sea por cumplir el sueño de Sammy.
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