Las escuadras de golf de la Universidad de Misisipi y la Universidad de Texas A&M jugaron este pasado fin de semana un partido de fútbol americano muy especial. Tan especial que, de hecho, lo único que tenía de football era el campo y el balón, ya que todo lo demás lo pusieron los propios golfistas. Field goals de 40 y 50 yardas disparados con los palos y algún que otro touchdown con los hierros actuando de quarterback fueron sólo algunos de los grandes momentos que se pudieron ver sobre suelo universitario. Por cierto, ganaron los Ole Miss de Misisipi. Para que luego digan que la mezcla de deportes no da juego.
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