El golf español ha experimentado durante 2010 el primer decrecimiento en el número de federados de su historia -si bien sólo un 1.6 %-, un hecho que sin embargo hay que calificar como moderadamente positivo si se tiene en cuenta la fuerte desaceleración económica que afecta al conjunto de España y su entorno más próximo.
A pesar de la patente crisis, el año 2010 ha concluido con 333.013 federados, según se desprende de los datos oficiales registrados a fecha 31 de diciembre de 2010. La cantidad reseñada supone una disminución absoluta de 5.545 federados con respecto al mismo día del año 2009, mientras que en términos porcentuales el decrecimiento se cifra en el citado 1.6 %.
Aunque estos datos indican un ligero retroceso, se cimenta al tiempo el gran crecimiento experimentado por el golf en España desde hace ya un par de décadas, confirmando la idea de que ‘el suelo’ de número de federados en nuestro país se encuentra holgadamente por encima de los 300.000.
Es preciso recordar que en 1990 apenas había 45.000 jugadores en España, el listón de los 100.000 se rebasó en 1996, se registraron 200.000 en los primeros meses de 2002, a mediados de 2004 se contabilizaron 250.000 y a finales de 2006 se superó la mítica barrera de los 300.000 federados.