Pocos podían imaginar que el duelo del siglo, el denominado The Match, se alargaría hasta el hoyo 22 en el Shadow Creek de Las Vegas, sin embargo una genialidad de Tiger en forma de chip and run en el 17 hizo que el espectáculo se fuera cuatro hoyos más allá de los reglamentados. Y es que fue este putt de poco más de un metro estudiado por los cuatro costados fue el que le daría el triunfo al zurdo de San Diego y con ello los nueve millones de dólares que la organización otorgaba al campeón.