Gonzalo Fdez.-Castaño es un buen amigo de Sergio García, jugadores contemporáneos aunque muy diferentes. El madrileño arropó en el pasado PGA Championship al castellonense después del ‘affaire’ del ‘pollo frito’ con Tiger Woods.
Gonzalo y Sergio tenían planeado compartir casa en el US Open pero esos planes se difuminaron cuando García cambió de idea. «Por desgracia cambió de opinión y decidió quedarse en un hotel», declaró Fernández-Castaño a golfdigest.com. «Me hubiera gustado haberme quedado con él porque creo que va a tener una semana difícil en el Abierto de EE.UU. después de lo que pasó en Wentworth», dijo.
Fdez.-Castaño partió el domingo por la mañana rumbo a Merion después de dos días preparándose en Sotogrande, donde asistió a la boda este pasado sábado a la boda de su amigo Álvaro Quirós al que conoce desde que éste tenía 16 años.
Al madrileño le hubiera gustado haber preparado mejor el segundo «major» de la temporada, pero no podía perderse la boda del padrino de su hijo pequeño. «Odio las bodas», dijo, «pero me encanta ser un buen amigo. Creo que él hubiera hecho lo mismo si hubiese ocurrido al revés», afirmó.