Esta semana tiene lugar el Open de Italia, quinto de los ocho torneos que componen la denominada Rolex Series, evento dotado con siete millones en el que Francesco Molinari, vigente campeón de The Open, primer italiano en ganar un Major y en la actualidad undécimo jugador en el ranking mundial, es el principal jugador en el campo junto a Justin Rose. Es por ello por lo que “Frankie” ha concedido una entrevista en la que habla del pasado, presente y futuro.
– ¿Qué cosas han cambiado de las temporadas anteriores hasta ahora?, si tiene que ver con tener más visibilidad, atención del público, etc. ¿Cuál ha sido todo el proceso de cambio?
– Sí, los mayores cambios han sido a partir del año pasado, con los éxitos que obtuve he conseguido mayor visibilidad. Y también los inicios de esta temporada, con la victoria en el Arnold Palmer. Después de estos meses ha habido sin duda un cambio de visibilidad que supone también menos tiempo para prepararse y más para dedicarse a otras cosas. Éste ha sido un poco el reto de esta temporada y de cara a la próxima.
– ¿Hay algo positivo en todo este tema de la atención? ¿Te quita tiempo, y tal?
– Depende de la personalidad de cada uno. Para mí, honestamente, no hay mucho positivo en ello, pero estoy tratando de acostumbrarme a otros ritmos y hacer lo posible para seguir el camino de progresión que empecé hace unos años. Este año, además, he jugado algo menos, también porque empecé la temporada tarde. Me puse enfermo cuando habría tenido que jugar en Los Ángeles, no jugué en Memphis… Así que, probablemente, el año que viene haré algún otro torneo.
– Te ha cambiado la vida en el juego, como profesional. ¿Te ha cambiado también la vida personal?
– No, no, porque además al vivir en un país – entre comillas – “extranjero”, no vivir en Italia, la cosa cambia. Y Londres – siempre se ha dicho – es una ciudad donde pasan tantas cosas, hay tantas personas famosas en los distintos campos del deporte, el teatro… No, la vida privada no me ha cambiado en absoluto.
– El año pasado sólo jugaste un torneo de otoño, ¿no?
– Sí, el año pasado estaba cansado, así que traté de descansar lo más posible y tenía en la cabeza el objetivo de la Race to Dubai, donde iba el primero y tenía que intentar acabar la temporada como primero. Este año me habría gustado jugar hasta 3 torneos del PGA Tour antes de Navidad pero, tal y como he planificado la temporada y por el hecho de que el Open de Italia está próximo en fechas a los torneos de Asia, era complicado hacerlo.
– La temporada anterior, los Majors – los grandes torneos – han sido un poco donde mejor has jugado, más centrado. La temporada anterior, la de Washington, conseguiste llevar esa intensidad a un torneo que no es tan importante. La pregunta es: ¿cómo haces eso con un torneo como éste o con otros torneos que no son los Majors? ¿Cómo llevas esa intensidad ahí?
– Sí, no es fácil ciertamente. Una de las cosas que han cambiado para mí es la forma en la que participo en los torneos del Grand Slam, en el sentido de que después de haber ganado uno, lógicamente, se plantea el sueño, el objetivo de seguir ganando otros con la evidencia de que puedo volver a hacerlo, mientras que antes de ganar tienes esperanzas, vas a los Majors tratando de jugar bien, pero tal vez con algo menos de presión, como es normal. Este año una de las cosas que he notado es que tal vez me haya equivocado al jugar casi siempre la semana siguiente a los torneos del Grand Slam. Es normal que después de tanta presión a la semana siguiente haya un bajón de energías y de concentración, de modo que al año que viene intentaré planificarme en la medida de lo posible para dar más antes y menos después de los Majors.
– Hay un tema que es el de la energía. Y tú, además, eres de los que entrenan siempre con presión todo el año, en los entrenamientos, en el juego… Entonces, ¿ese equilibrio se hace complicado a veces, o al final de la temporada?
– No, al contrario, pienso que el hecho de entrenar con más intensidad y más presión ayuda después a mantener la atención, la concentración, más constante entre un torneo y el siguiente. Por los motivos que decíamos antes, la atención este año ha sido menor, por los tiempos más cortos y otros factores. Este año, sobre todo en las semanas de los torneos distintos al Grand Slam, ha habido tal vez algo menos de intensidad en los entrenamientos, y ése es probablemente el motivo de que algún torneo no haya salido tan bien como esperaba. En mi opinión, el hecho de entrenar con intensidad y presión ayuda luego a mantener la concentración en los torneos, no es algo negativo.
– Si tienes que pensar cuáles son los cambios, los ajustes más importantes para esta temporada, ¿qué es lo que estás “reseteando”?
– Tengo que dar más, aunque tenga también que atender a los medios, a los patrocinadores, etc. Esas cosas no puedo controlarlas, pero tal vez este año les haya prestado mentalmente demasiada atención y he frenado un poco los entrenamientos, creyendo que así conservaba las energías. Por el contrario, el año que viene intentaré apretar algo más, entrenarme como lo hacía el año pasado, aunque tenga también que atender a la prensa o a los patrocinadores. Ése es el mayor cambio que me gustaría hacer: seguir entrenando en el campo, y en el gimnasio, con la intensidad del año pasado.
– Por último: los torneos, el calendario del año que viene, el calendario para este año… ¿De qué torneos tienes más ganas, o estás esperando? ¿Vas a volver al Máster?
– Sí, claro, el Grand Slam en general, y el Masters después de este año será, naturalmente, una buena ocasión. Volver y tratar de hacerlo bien. Ya veremos, obviamente hay muchos factores, no es fácil encontrarse de nuevo peleando por la victoria ese fin de semana, pero estaría bien tener otra posibilidad. En general, los torneos del Grand Slam, está el PGA aquí en Harding Park, que es un campo en el que he jugado, Royal Saint Georges que me gusta mucho, y Winged Foot, en el que no he jugado nunca, pero tengo curiosidad. Y lógicamente los Juegos Olímpicos, que son un objetivo bastante importante, especialmente para alguien como yo, que ya tiene cierta edad y tendré esta ocasión y como mucho otra más, pero no habrá muchas Olimpiadas en mi futuro, y por tanto estaría bien intentarlo con todas mis ganas.