Seguro que recuerdan a Jeff Flagg. Este norteamericano se proclamó el año pasado campeón del mundo en distancia con el drive. Para todo aquel que no pudo ser testigo de su hazaña hace unos meses, puede deleitarse con el siguiente vídeo, porque muestra a la perfección la fuerza de la que hace gala. Flagg se enfrenta a un par4 con un enorme lago en medio e intenta colocarla en el green desde tres distancias.
Para la primera (278 metros) decide utilizar un híbrido y lo consigue al primer intento, así como para la segunda (342 m.), en la que ya utiliza su famoso driver. Tras pasar sin despeinarse los dos primeros retos llega el desafío final. Es cierto que necesita ocho intentos, pero el golfista de Illinois pega un drive desde 393 metros para dejarla a sólo unos pasos del agujero. ¡Qué bestia!