Se estaba viendo venir durante toda la mañana en Pittsburgh y al final se ha optado por cortar de raíz con el problema: suspensión de la jornada y el viernes será otro día. Se pone así fin a una ronda de lo más accidentada sobre la hierba de Oakmont para abrir boca en este US Open.
Y es que solo nueve golfistas consiguieron terminar sus primeros 18 hoyos en este segundo Major de la temporada. Y aunque cueste creerlo de momento tenemos a un líder amateur en Casa Club… y sí, lo ha hecho bajo par.
Se trata de Scottie Scheffler (-1) que, gracias a tres birdies y dos bogeys, se ha colocado como el jugador que mejor tarjeta ha entregado en estas primeras horas de campeonato. Aunque, teóricamente, la alegría le va a durar poco. Concretamente el tiempo que tarde su compatriota Andrew Landry (-3) en terminar de jugar el hoyo 9, bandera en la que se suspendió el juego cuando tenía putt para birdie.
Para todo aquel que no lo conozca, Landry ocupa en estos momentos el puesto número 624 del ranking mundial y disputa esta temporada su primer año en el PGA tras haber obtenido la tarjeta mediante sus buenas actuaciones en el web.com. Asimismo, de los 11 eventos disputados este curso tan solo ha podido superar el corte en 5 de ellos. Pero ya sabemos lo caprichoso que es el golf.
La muestra más clara de esto es el clima, que ha impedido a los participantes disfrutar de una grata experiencia sobre la hierba –si es que disfrutar es la palabra- y ha obligado a suspender la jornada hasta en tres ocasiones, siendo la última de ellas definitiva. Así pues, tras Landry nos encontramos con -2 a Bubba Watson y a Danny Lee y con -1 al mencionado Scheffler, Streelman, Westwood y English –únicos capaces de ganarle al campo hasta el momento-.
Tanto Jon Rahm (+6) como Rafa Cabrera-Bello (+4), únicos españoles en este turno de mañana, han tenido serias complicaciones para mantener la compostura y, con tres y cuatro hoyos por disputar respectivamente, les espera una dura remontada si quieren seguir presentes el fin de semana.
Especialmente difícil lo ha tenido el vasco que, en su primer Major, ha debutado con el traspié que le produjeron tres bogeys y dos doblebogeys. No mucho mejor le ha ido al isleño, que todavía no conoce lo que es un birdie y acumula ya cuatro bogeys –todos ellos en las últimas siete banderas- y unas sensaciones de tener que dar un paso adelante si quiere sacar algo positivo.
Se espera que los partidos se reanuden a primera hora de día y se pueda terminar la ronda si ningún otro imprevisto lo impide. Tocaremos madera, porque para la mañana también se esperan lluvias a espuertas.