Al contrario de lo que sucede en el equipo capitaneado por el norirlandés Darren Clarke, el combinado de las barras y estrellas todavía está verde en cuanto a su composición –y eso que apenas restan dos meses para que el Hazeltine National de Minnesota acoja una nueva edición de la competición más laureada en el mundo del golf-. Con el PGA Championship tocando a la puerta y con los Playoffs de la FedEx Cup a la vuelta de la esquina, son muchos los jugadores de Estados Unidos que todavía tienen posibilidades de clasificarse para la Ryder. Es más, el capitán norteamericano David Love III ha animado a todos sus pupilos y les ha dejado claro que irá el que esté “en mejor forma”.
Así de rotundo se mostró el timón de la nave estadounidense este pasado martes, que dejó claro que entre las ausencias en los Juegos Olímpicos y las numerosas lesiones, tendrá que estar atento también a los PlayOff de la FedEx para configurar el equipo. “Jugadores como Brooks Koepka, que no ha estado en el Open, Daniel Berger, de baja entre dos o tres semanas, o Jim Furyk, que se ha perdido entre 10 y 12 torneos este año, aún tienen posibilidades de clasificarse. El ranking mundial es un factor a tener en cuenta, pero nosotros tenemos nuestra propia tabla en la cabeza.”, afirmó Love III.
“Sería muy fácil hacer eso de seleccionar a los 12 primeros jugadores y ya está, pero hay que tener en cuenta otras variables. Sin ir más lejos, Phil Mickelson estaba en torno al 20 del mundo en la pasada Presidents Cup y al final fue la gran estrella del equipo en Corea. Jugó increíblemente bien. Creo que vamos a mirar algo más abajo de lo que la gente se piensa”, continuó.
Esto supone una bocanada de aire para golfistas como Rickie Fowler, Patrick Reed o el propio Brooks Koepka, que en estos momentos se encuentran fuera de esos ocho jugadores que se clasifican automáticamente. “Lo que le quiero decir a Brooks o a cualquier otro es que salgan a jugar y a ganar, porque si están jugando bien no tendrán de qué preocuparse ya que estarán dentro del equipo”, sentenció. Unas palabras que no harán otra cosa que aumentar la competencia entre todos los deportistas del Team USA.