El domingo por la mañana fue un momento de auténtico lujo para el deporte español. Por un lado, Nacho Elvira y Rafa Cabrera-Bello intentando dar caza al surcoreano Jeunghun Wang en el Qatar Masters; por otro, Carlos Pigem obteniendo el subcampeonato en Myanmar y en la otra parte del planeta Rafa Nadal y Roger Federer batiéndose -como acostumbraban a hacerse años atrás- por conseguir la hegemonía en el Open de Australia. Si eran de esos que estaba con un ojo puesto en una pantalla y otro en otra les informamos de que no eran los únicos, y es que nadie quiso perderse por nada del mundo el duelo vintage entre el tenista suizo y el manacorí, ni siquiera Jack Nicklaus.
Al considerado por muchos mejor golfista de todos los tiempos le une un lazo muy especial con el deportista helvético desde hace unas horas: los dos se han alzado con la friolera de 18 Grandes, una auténtica barbaridad en sus respectivos deportes. Y lo han hecho casi de la misma manera, con una superioridad arrolladora –con permiso de Nadal- en los 17 primeros y dando la sorpresa en el decimoctavo, cuando ya nadie esperaba que volvieran a la senda del triunfo. “La mayor parte de mis primeros 17 Majors esperaba ganarlos si trabajaba duro y creía en mis posibilidades, y estoy seguro que Roger pensaba de la misma manera”, afirmó Nicklaus en una reciente entrevista concedida a la ATP.
“Sin embargo, hay un punto en el que todo cambia y nada vuelve a ser igual. Y aun así, después de mucho pelear con el cuerpo y la mente, éstos terminan recordando cómo se hacía y vuelves a triunfar. Estoy convencido de que hace seis meses Roger sabía a ciencia cierta que no tenía ninguna posibilidad en este evento. Pero de pronto llega a semifinales y recuerda lo que un día fue y cómo lo hacía… Y gana”, sentenció el estadounidense.
La pasión del Oso Dorado por los deportes es conocida por todos, pero el tenis guarda un hueco especial en su corazón gracias a su padre, que llegó a ser campeón en la ciudad de Columbus. “Mi padre me introdujo en el tenis cuando era un niño y me enseñó lo suficiente como para entender y amar este deporte”. Así que sí, Nicklaus también ha vibrado más de una vez con el ímpetu y tenacidad de Rafa.