Internet es una herramienta fantástica en la que, en muchas ocasiones, podemos encontrar aquello que una vez soñamos hacer pero que nunca nos atrevimos a llevarlo a la práctica –bien por falta de tiempo, bien por falta de medios-. Y esta es una de esas veces. Los chicos de los laboratorios FABberz de Nueva York apostaron por un experimento interesante relacionado con las pelotas de golf: tomaron cuatro de diferentes épocas y marcas y las pasaron por el rayo láser para ver de qué manera ardían. Tal cual.
Estos científicos quisieron poner la atención en cómo se fundían los materiales al someterlos a una alta temperatura, y los resultados fueron asombrosos. Dependiendo del año en que estuvieran fabricadas las bolas, los materiales salían a la luz de manera diferente. Ciencia y golf unidos de la mano.





