La sala de prensa del IFEMA se llenó de periodistas expectantes por conocer la última hora del golfista vizcaíno después de su brillante temporada en el PGA Tour –victoria incluida-. Y lo cierto es que no decepcionó para nada. El desparpajo y la cercanía del león de Barrika contagió a los medios, y su sinceridad enamoró a todos los presentes en la videoconferencia que Jon Rahm mantuvo con los medios de comunicación de España y en la que OpenGolf, por medio de su director, Fernando Molina, fue parte activa de la misma.
Fue una pregunta precisamente de nuestro director, con la que se interesaba de cual era el papel de Tim Mickelson y quienes componían su equipo, por la que Jon Rahm dio a conocer los detalles de cada uno de ellos, algo que hasta el momento prácticamente se desconocía.
«El papel de Tim Mickelson es fundamental. Es quién organiza todo y el que me mantiene a raya para que no me salga del carril«, nos contaba Rahm sobre el que fue su entrenador en Arizona State y ahora su manager y mano derecha.
«El equipo consta de Eduardo Celles«, colaborador de lujo de en OpenGolf y maestro de Jon Rahm desde hace 10 años. «Joseba del Carmen«, coach mental. «Mi preparador físico que se llama Spencer y luego dos fisios que son diferentes: Jimmy Yuan y Harry. Harry es el que viaja conmigo porque Jimmy tiene bastante trabajo con otros deportistas y tienen diferentes técnicas. Harry me ayuda a calentar y relajar y me mantiene en forma durante el torneo, mientras que Jimmy hace acupuntura y trabaja mucho con técnicas orientales, además de ayudarme a recuperar cualquier posible lesión«, continúa el vizcaino.
«Y obviamente está Adam Hayes, mi caddie, que es quien más me ha ayudado por la gran experiencia que tiene y por lo bien que sabe llevarme por el campo y decirme lo que tengo que jugar, cómo jugar, y cómo me dice lo que tiene que decirme en cada momento. No tiene miedo, y se vio varias veces en Augusta, a pararme aunque esté puesto a la bola y a poner en duda mi estrategia o el palo que vaya a pegar, pero siempre respetándome. Y el 99,99% de las veces me ayuda a tomar la decisión correcta«, dijo Rahm sobre su caddie en la alocución.
Y proseguía: «El mejor ejemplo, Torrey Pines. Del hoyo 10 en adelante, en un campo complicado, al ver que estaba jugando tan bien me dijo que me fuese a por todas las banderas que quedaban, que daba igual. En el 18 me dijo: “al hoyo, vamos a hacer birdie, cien por cien”. No sé cuántos caddies, a 215 metros de bandera, desde un búnker a un green que no es fácil le dirían al jugador sin dudarlo “coge este hierro y pégale”. Pocas veces me para, porque somos muy agresivos los dos, pero es un caddie que me complementa muy bien y el que más me ha ayudado hasta ahora”.
Un gran equipo que ya ha empezado a dar sus frutos en apenas diez meses como profesional, un título en el PGA Tour, un subcampeonato del mundo, 6 Top 10, 12 cortes pasados en 12 eventos jugados, 13 en el ranking mundial, cuarto en la FedEx Cup… Y esto no ha hecho nada más que empezar.