Esta pasada semana hemos vuelto a ser testigos de cómo otra persona con reconocida trayectoria profesional acusaba a Donald Trump de hacer trampas en el golf –su deporte fetiche, como ha reconocido en más de una ocasión-. Esta extraña capacidad para meterse en líos que tiene el ya candidato del partido republicano a la Casa Blanca ha provocado que muchos usuarios de las redes sociales comiencen a utilizar el sobrenombre de Trumpas para referirse a él, un apodo que le va como anillo al dedo a tenor de las palabras del ex boxeador mexicano-estadounidense Óscar de la Hoya.
“Es duro decirlo, pero sí, pillamos a Trump haciendo trampas en pleno partido de golf”, confirmó a Associated Press el que fuera campeón mundial en diferentes categorías. “Fue algo increíble, pero como era su campo de golf imaginé que eran sus reglas”, continuó el deportista.
La situación, como relató De la Hoya, fue bastante surrealista, puesto que no se encontraban solos sobre la hierba del complejo. “Nosotros hicimos nuestras salidas desde el tee y cuando llegó su turno lanzó como unas cuatro pelotas: la primera, al agua; la segunda, fuera de límites; la tercera, de nuevo al agua y la última encontró los arbustos. Cuál fue nuestra sorpresa cuando fuimos a pegar nuestro segundo golpe y lo encontramos en medio de la calle diciéndonos que había aparecido su primera bola. ¿A quién quería engañar?”, confesó.
Pero no acabó aquí la cosa. El ex boxeador reconoció que esta situación se volvió a producir un poco más adelante. “Esto demuestra cómo es este personaje. El golf es un deporte de caballeros. No se puede mentir ni sobre tu resultado ni sobre el movimiento de tu bola. Tarde o temprano se demostrará que todo lo que decimos sobre él es la pura verdad”, sentenció.
Y pensar que una persona así pueda llegar a gobernar uno de los países más importantes del mundo…
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