Doscientos puntos de sutura necesitó el escocés residente en Canadá, Dougie Thomson tras ser atacado hace pocas fechas por un cocodrilo mientras jugaba una ronda de golf junto a otros canadienses en el campo de golf del Hotel Iberostar de Cancún.
Thompson, de 58 años de edad, acababa de golpear la bola desde un “waste bunker” cuando de pronto le atacó un reptil mordiéndole en el muslo derecho. “Le di a la bola poniéndola en el green cuando de pronto escuché un ruido justo a mi espalda. Ahí estaba ese enorme cocodrilo hundiendo sus dientes en mi pierna tratando de arrastrarme hasta la laguna. Toda mi familia quedó traumatizada, pero afortunadamente estoy vivo”.
Brendan O’Hara, amigo de Thompson recuerda, “Por el rabillo del ojo vi que algo se movía entre los arbustos hacia Dougie pero no me di cuenta hasta que le oí gritar. Me encontré con mi hierro 9 en la mano y empecé a golpear al cocodrilo en la cabeza. Cuando empecé a golpearlo, se detuvo, pero no lo soltaba, afortunadamente los otros dos amigos lograron atacar al cocodrilo con un coche eléctrico, momento que el animal soltó a Thompson.»
Este no es el único ataque de un cocodrilo a un jugador de golf en el Hotel Iberostar de Cancún. A principios del mes de septiembre un golfista perdió dos dedos por el ataque de un cocodrilo en el mismo Resort.
Edward Lunger, de 50 años y natural de Holtsville, demandó al hotel al que le exige más de dos millones de dólares de indemnización. Thompson, sin embargo, todavía no ha decidido si entablará acciones judiciales contra la empresa. La herida necesitará de varias operaciones y de cirugía plástica.