En el RBC Canadian Open se dio una coincidencia curiosa y feliz. El estadounidense Hunter Mahan lideraba tras dos rondas el torneo, de una manera sólida y directa hacia su primera victoria del PGA Tour 2013 y sexta de su carrera. Cuando Hunter estaba en la cancha de prácticas antes de la tercera vuelta recibió una llamada de móvil. Su esposa, Kandi, se puso de parto.
Mahan se retiró del torneo, dejando atrás cientos de miles de dólares para estar con su esposa en el nacimiento de su primer hijo.
Zoe nació sin complicaciones y fue la mejor noticia para Mahan y para el patrocinador PING, que le envió un putter de oro a pesar de no ganar. «Zoe Olivia Mahan; Julio, 28 – 2013», reza una inscripción en la cara del palo.
PING regala sus famosos ‘putters’ de oro a los ganadores de los torneos profesionales de todo el mundo desde la década de 1970, pero esta vez hizo una excepción. El mismo director de PING, John Solheim, señaló que a veces una victoria no es solo un trofeo de golf.
«Nunca sabremos si Hunter habría ganado esa semana, pero las circunstancias eran tan únicas que hemos querido crear un recuerdo duradero de Hunter, Kandi y Zoe. Siempre les traerá a la memoria ese día tan especial. El nacimiento de un niño es un triunfo de la forma que se mire», dijo Solheim.