

Barack Obama, presidente de los EE.UU. y gran aficionado al golf, no dudó en mencionar a Rory McIlroy en uno de los discursos programados durante la celebración de la cumbre del G8 celebrada en Irlanda del Norte. .
“Conocí a Rory McIlroy el pasado año, y se ofreció para ordenar mi swing. Lo que era una forma muy educada de decir: ‘Sr. Presidente, usted necesita ayuda’”, la sola mención del nombre del número dos del mundo por parte de Obama arrancó los aplausos de la multitud reunida.
Durante el mismo también lamentó el no poder jugar en unos de los países con más tradición de golf antes de marcharse a su país. “Estoy triste de no poder jugar alguna ronda por aquí estos días”, dijo.





