Mentiríamos si dijéramos que la vida del genial golfista californiano no da para un libro –y para dos… y hasta para un largometraje- . Victorias, líos extramatrimoniales, lesiones, algún que otro triunfo más… Lo cierto es que la trayectoria de Tiger, por lo ya comentado en más de una ocasión al tratarse de una persona pionera para la población afroamericana en un deporte como el golf, da para largo y tendido. Es por esto que el ex número 1 del mundo se ha decidido a relatar sus hazañas. Y su primera prueba de fuego es contar cómo vivió su gran triunfo: el Masters de Augusta de 1997.
Aquella segunda semana del mes de abril nadie esperaba que sucediese algo parecido a lo que acabó ocurriendo en Georgia. Un joven de raza negra desgarbado, con un gran potencial pero que apenas se había probado en torneos de tanta envergadura –su mejor posición hasta la fecha en un Major había sido un T22 en el British de un año antes- iba a comenzar a forjar una leyenda que le llevaría años después a ser considerado como uno de los más grandes de la historia del golf.
Tom Watson, Fred Couples, Bernhard Langer, José María Olazábal, Jack Nicklaus, Seve Ballesteros, Gary Player o Nick Faldo fueron solo algunos de los nombres con los que el estadounidense coincidió durante su estancia en el torneo. Todos ellos ya habían sido campeones aquí, pero ahora era su turno. Se colocó cuarto al término de los primeros 18 hoyos y, a partir de aquí, fue todo un vendaval. Tiger se enfundó la Chaqueta Verde con el resultado más bajo de toda la historia del campeonato (-18) –números que igualó en 2015 Jordan Spieth- y con la diferencia de golpes respecto al segundo clasificado jamás conseguida en el Augusta National (12).
Una proeza que quiere compartir a través de su puño y letra con la ayuda del periodista canadiense Lorne Rubenstein y que verá la luz el próximo mes de marzo con motivo del vigésimo aniversario de la gesta. “El Masters de 1997 fue uno de los momentos más importantes de mi vida por varias razones”, afirmó a través de un comunicado en su página web. “Pienso en el abrazo con mi padre y en todo lo que viví esa semana. Mucha gente conoce cosas alrededor del campeonato, pero ésta será una gran oportunidad de contar con detalle todo lo que sucedió tanto dentro como fuera del campo”, concluyó.
Será la segunda incursión de Tiger en el mundo de la escritura, después de que en el año 2001 se publicara Cómo juego al golf, un manual escrito con la ayuda de los editores de la revista Golf Digest.