No es que nos pille por sorpresa, pero siempre es duro corroborar que Tiger –uno de los jugadores más importantes de la historia del golf – se pierde un Grande. Ya lo hizo con el Masters de Augusta, siguió con el US Open, poco después con The Open y hace solo unas horas acaba de poner el punto y final a los Major 2016 con su ausencia en el PGA Championship –plaza que ocupará Harold Varner III-. Pero las malas noticias no vienen solas. Y es que el californiano ha confirmado a través de su agente, Mark Steinberg, que con esta ausencia deja visto para sentencia un curso para olvidar.
Será la primera vez desde 1994 que los cuatro Majors de una temporada se disputen sin la presencia de Tiger Woods. 21 años de manera ininterrumpida en la que el deportista estadounidense ha estado en, al menos, uno de los Grandes que se han cortado de raíz por culpa de su maltrecha espalda, que todavía le deja poco margen de maniobra.
“Tiger sigue avanzando, pero simplemente no está listo para competir en el PGA. No jugará durante la temporada 15/16 y continuará con su rehabilitación y trabajo duro para llegar a pleno rendimiento al comienzo de la 16/17”, comentó su agente ante los micrófonos de Golf Channel.
El próximo agosto se cumplirán doce meses desde que pudimos verle por última vez compitiendo en un torneo de golf. Fue en el Wyndham Championship, evento en el que cosechó un Top 10 días antes de someterse a dos cirugías en la espalda prácticamente consecutivas para ponerle freno a los intensos dolores que el norteamericano tenía en la espalda. Poco a poco Tiger va recuperando el ritmo competitivo, pero como él mismo ha llegado a comentar en alguna ocasión: “Todavía no estoy listo para jugar al máximo nivel durante cuatro días seguidos”. Esperemos tenerle de vuelta pronto.