A escasos días para que el californiano alcance los 41 años, la alegría vuelve a llenar la casa de Tiger. Y es que, además de su vuelta a los campos en Bahamas y de su tan cacareado regreso al PGA Tour el próximo mes de febrero –lo hará en el Genesis Open, el torneo que le vio nacer en el mejor circuito del planeta-, el ex número 1 del mundo puede presumir de contar con una buena reputación en cuanto a diseños de campos de golf –y eso que no lleva mucho tiempo en el mundillo-. Sin ir más lejos, Golf Digest USA calificó su diseño del Bluejack National como el mejor de un campo privado en las últimas fechas.
Esto, unido a su nombre sobre la hierba del campo de golf, ha provocado que multitud de campos se lo rifen para hacer de sus complejos un lugar preferente dentro de su región. Y hay uno que ha conseguido llevárselo al huerto en Chicago, la ciudad del viento. En un ambicioso proyecto respaldado por el presidente Obama y por el alcalde de la ciudad, Rahm Emanuel, la TGR Design –la empresa del golfista- ha alcanzado un acuerdo para restaurar los campos públicos de Jackson Park y South Shore y hacer de ellos un gran complejo de 18 hoyos y uno corto o, en su defecto, de pares 3.
“Este proyecto puede crear increíbles posibilidades para la comunidad en el lado sur de la ciudad”, escribió Tiger en un comunicado. “Queremos diseñar un campo en el que todos, independientemente de su nivel, puedan disfrutar”, sentenció. En esta misma línea apuntó Teddy Greenstein, periodista del Chicago Tribune, en una de sus columnas. “Durante décadas, los empresarios de golf de Chicago se han preguntado si sería posible refundar Jackson Park para poder llevar a cabo la construcción de un campo deslumbrante que pudiera albergar un evento importante del PGA Tour. A partir de este acuerdo, la respuesta es sí”, confirmó el reportero.
Ahora solo queda esperar a que en los próximos días Emanuel anuncie la formación de la Alianza de Parques de Golf de Chicago, una organización sin ánimo de lucro que se va a encargar de mejorar los campos y las instalaciones de golf de la zona de Chicago Park District, de llevar a cabo programas de golf para jóvenes y, por lo que atañe al proyecto, de recaudar fondos para hacer realidad el sueño de toda la ciudad.
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