Cuando pensábamos que el nivel de ridículo público de este personaje no podía ser mayor –solo hay que recordar la historia de la estatua conmemorativa de uno de sus campos de golf para echarse las manos a la cabeza- Donald Trump ha querido volver a ser uno de los temas candentes en las conversaciones de todas las redes sociales, y no precisamente por lo acertado de sus palabras.
En esta ocasión el perjudicado ha sido el golfista Colin Montgomerie. ¿Qué tendrá que ver el escocés en todo esto?, pensarán. Muy sencillo. El deportista aprovechó su visita a las instalaciones de Turnberry para promocionar el turismo del golf en las islas británicas, y lo hizo con el siguiente tweet: “Hoy hemos estado en el @TrumpTurnberry, el mejor complejo links de toda Gran Bretaña. El Ailsa Course vuelve a abrir sus puertas el próximo mes de junio. ¡No puedo esperar para jugar en él!”.
Ni corto ni perezoso –y agradeciendo el capote del jugador de 52 años- Trump se apresuró a responder a través de su perfil de Twitter… y lo que hizo fue lanzarle un dardo envenado: “Colin, encantado de tenerte en Trump Turnberry. ¡Muy orgulloso de ti y de tu gran juego! ¡Hiciste que ganar Majors pareciera fácil!”.
Efectivamente. El candidato republicano a la presidencia de los Estados Unidos le agasajó al británico con algo que nunca le habían dicho –entre otras cosas porque nunca lo había logrado-. ¡Y lo mejor de todo es que días después de estas palabras, y con las consiguientes propuestas de rectificaciones de otros usuarios, el Tweet sigue estando visible para todo el mundo!
No sabemos cómo le habrán sentado estas palabras a Montgomerie, pero lo que es seguro es que alguien que ha acabado segundo en los Grandes en tantas ocasiones –cinco para ser más exactos-no tiene el cuerpo para estos chascarrillos, aunque parezca que no tienen mala intención.