Todas las alarmas saltaron en el Departamento de Policía de Los Ángeles cuando una llamada telefónica alertó de que un oso, en este caso osa, merodeaba por los alrededores del Knollwood Country Club en Granada Hills, campo de golf situado a las afueras de Los Ángeles.
Todo comenzó sobre las 7 de la mañana (hora local) cuando el Director del Club, Voltaire Aniceto, fue avisado por la policía comunicandóle que «teníamos que evacuar el campo de golf, ya que un oso había sido avistado en el hoyo 11.»
Un helicóptero y agentes de la policía armados, acudieron al campo con la intención de proteger a jugadores y residentes de la zona hasta la llegada de los agentes especiales.
El animal fue localizado sobre las 13:00 en el hoyo 13 cuando un dardo tranquilizante lo dejó dormido para devolverlo a su habitat natural, las montañas entre Los Angeles y Santa Clarita. «El animal solo se perdió, ocurre de vez en cuando, dijo dijo Andrew Hughan, portavoz del «California Department of Fish and Wildlife», acostumbrado a este tipo de incidentes.
Uno de los vecinos del lugar declaró, «He visto venados, coyotes y serpientes de cascabel, pero nunca un oso».