Hace tiempo que no tenemos noticias de Jason Day. Y es que el australiano está aprovechando realmente bien sus primeras vacaciones consolidado en el Top 3 mundial. Pero ya toca trabajar, y el oceánico se ha puesto manos a la obra para tratar de mejorar los grandes resultados del año pasado.
Y qué mejor manera de comenzar los entrenamientos que con un bola 9. Pero ojo, no una partida de billar al uso. Y es que los chicos de Golf Digest le pusieron a Day el reto de convertir el green en una mesa de billar y de introducir las bolas en el menor número de golpes posibles. Y vaya si lo hizo.





