Ni el trabajo en equipo evita en ocasiones solventar el entuerto en el que se meten muchos jugadores durante el transcurso de una ronda de Golf. Sin ir más lejos, los protagonistas de esta historia se enfrentaron al hecho de tener que recuperar una bola de un obstáculo de agua… y la cosa no salió como lo habían planteado. Sobre todo porque el que se aventuró a acercarse al agua casi no sale por culpa del empinado talud que tenía delante. Algo que no solucionó ni siquiera con la ayuda de sus otros dos compañeros de juego.