El gaditano Mario Galiano, uno de los mejores amateurs de los últimos años, es el nexo de unión entre el combinado que fue campeón de Europa Absoluto por Equipos en 2014 y el que tratará de conseguir el cuarto título para España del 5 al 9 de julio en el campo francés de Golf Chantilly.
El andaluz, con un palmarés envidiable, es el encargado de relatar a sus compañeros cómo se puede llegar a la cima del golf continental, tal y como sucedió dos años atrás en Finlandia. Entonces jugó codo con codo con cinco chicos que ahora tratan de abrirse camino en el golf profesional, como son Scott W. Fernández, Daniel Berná, Emilio Cuartero, Pep Anglés y Jon Rahm.
Esta vez sus compañeros de viaje son el asturiano Iván Cantero, el vizcaíno Javier Sainz, el madrileño Alejandro del Rey, el cántabro Manuel Elvira y el malagueño Ángel Hidalgo. Pablo Fisas en el papel de capitán, y Txomin Hospital en el de entrenador, completan la delegación.
Las credenciales del equipo para entrar en el primer peldaño de aspirantes al título están sobre la mesa. Iván Cantero ganó hace apenas un mes el Internacional de Francia Masculino con una actuación soberbia; si el triunfo ya de por sí es relevante, el hecho de haberlo logrado en el mismo campo de Chantilly es un gran motivo para la esperanza.
Alejandro del Rey, nuevamente coronado campeón de España Sub 18; Ángel Hidalgo, flamante campeón de España Absoluto; o Manuel Elvira y Javier Sainz, con plaza en el Top 5 de esta prueba celebrada en El Saler. Todos los componentes del equipo han demostrado este curso que están para las misiones de mayor dificultad. Y esta la es.
El camino hacia las medallas está minado por la oposición de los otros 15 combinados restantes: Alemania, Irlanda, Inglaterra, Italia, Bélgica, Escocia, Francia, Noruega, Austria, Portugal, Suiza, Suecia, Holanda, Finlandia y Dinamarca.
Este torneo se disputaba de forma anual hasta 2011, cuando la European Golf Association (EGA) decidió que el torneo fuese bianual, de ahí que en 2012 no se celebrase. Un nuevo cambio de normativa devolvió la condición de anual desde 2013.
El formato de competición establece dos jornadas stroke play (juego por golpes) que permiten establecer una clasificación antes de disputar las diversas eliminatorias por el título. Es condición indispensable ocupar una de las ocho primeras plazas en la fase previa para optar al título en juego.
España, ganador en tres ocasiones
El espejo en el que debe mirarse España en Suecia es la edición de 2014, en la que consiguió su tercera medalla de oro con una espectacular demostración de acierto y solvencia en el campo de Linna Golf Club (Finlandia). Los citados Mario Galiano, Scott Fernández, Daniel Berná, Emilio Cuartero, Pep Anglés y Jon Rahm formaron un grupo sólido dentro y fuera del campo que coronó una semana fantástica con la victoria en la gran final ante la poderosa Irlanda por 5-2.
Segundos en la fase clasificatoria –sólo superados en ese punto por Inglaterra–, los españoles dieron buena cuenta en las eliminatorias por el título de Francia, Escocia y, por último, del cuadro irlandés.
Los precedentes anteriores se encuentran en las ediciones de 1997 y 2003, en las que España se alzó con el título. En 2003, en La Haya (Holanda), España se valió del talento de Alejandro Cañizares, Gonzalo Fernández-Castaño, Sebastián García-Grout, Alfredo García Heredia, Pablo Martín y Álvaro Quirós.