Hay posiciones de bandera que son difíciles de entender como esta del Penn Golf Course en la que un jugador aficionado vio como su bola sin apenas tocarla se iba hasta el bunker debido a la caída del green.
La bola que se encontraba a menos de dos metros del agujero pasó a unos pocos centímetros del hoyo por la derecha, pero cuando parecía que iba a parar comenzó a rodar ante el asombro de los jugadores.





