Cuando se intentan tapar los agujeros en el juego con bromas puede ocurrir que se acabe siendo el centro de las mofas. Y es que ya lo dice el refranero español: más vale ser gracioso que caer en gracia
Cuando se practica hay que ser precavidos, pero más aún cuando están presentes familiares y/o amigos. ¿La razón? Bien sencilla. Hay ocasiones en las que se pretende hacer una gracia y ésta, por H o por B, no sale bien. Y no solo eso, sino que puede acabar en desgracia. Y si no que se lo digan a nuestro siguiente protagonista que, simulando haberle pegado tan fuerte a la bola –cuando había fallado estrepitosamente en el swing- simuló seguir su rastro hasta que tropezó y cayó al suelo.
Una nueva modalidad de balconing que, pese a que se quedó en un susto, da buena cuenta de lo peligroso que puede ser hacerse el sandunguero.
My cousin fell at @Topgolf #Tolpgolfdfw #fortworth ??? pic.twitter.com/9TtytKtJy8
— Nathan ? (@EnvyNate) 14 de mayo de 2017





