Tras la locura vivida en las últimas horas por culpa de la victoria de Tiger Woods en East Lake, vamos a atrevernos a hacer ahora un ejercicio de imaginación con motivo del fin del actual formato de los PlayOff. Y es que, aunque a grandes rasgos a partir de la próxima temporada se llevará el bonus de la FedEx quien consiga llevarse el Tour Championship, no hay que olvidar que para llegar a esto el campeonato final de la postemporada tendrá que introducir la medida de premiar a los jugadores más regulares durante el año.
Esto es, que el primero de a FedEx partiría con un –10, el segundo –8, el tercero –7, el cuarto –6, el quinto -5 y, a partir de aquí, cada grupo de cinco jugadores empezará con un golpe por debajo comenzando en el -4. ¿Dónde queremos ir a parar con esta explicación? Que a pesar de la grandísima semana llevada a cabo por Tiger y de su triunfo sobre la hierba de East Lake, ateniéndonos a los criterios de la próxima temporada el californiano no se hubiese llevado tampoco la FedEx.
La explicación es bien sencilla. El jugador norteamericano empezaba la semana desde el vigésimo puesto en la lista, lo que le hubiese otorgado un -2 con el que empezar el torneo. Si a esto le sumamos el once bajo par que consiguió en los 72 hoyos nos hace un total de trece bajo par, números insuficientes para haber alcanzado a Justin Rose. Al británico le hubiese bastado el seis bajo par que sumó para hacer bueno su -8 de la segunda plaza y alzarse con el preciado galardón. Un premio que se le resistiría a DeChambeau, al que el -1 en el torneo le hubiese hecho un flaco favor al -10 de ventaja.
Sea como fuere nos tocará familiarizarnos con el nuevo formato, que promete hacernos vibrar tanto o más que el actual en una semana en la que mantener la concentración durante los 72 hoyos será clave.