Si bien es cierto que Sergio García (70 golpes, -8) no ha podido demostrar este viernes el gran nivel que dejó patente en la jornada inaugural de este Omega Dubai Desert Classic, otro español ha cogido el testigo del castellonense para ganarse un lugar en el partido de la jornada del sábado. No es otro que Álvaro Quirós (64 golpes, -11), que hoy ha vuelto a demostrar ese nivel que nos enamoró hace unos años y que lo convirtió en uno de los pesos pesados de la Armada.
Y eso que el gaditano no empezó nada bien la segunda jornada. Un bogey en su primera bandera del día le complicaba el corte al situarse en un dos bajo par de manera momentánea. Pero este error tempranero no hizo más que espolear al andaluz, que tuvo su actuación más brillante de los últimos tiempos -al menos en cuanto a números se refiere-. Quirós comenzó a hacer gala de su tremenda pegada y un toque exquisito con los hierros, algo que le permitió hacer frente a oportunidades claras de birdie casi en cada bandera.
De esta manera sumó cinco en la primera parte del recorrido, a los que tuvo que sumar cuatro más en los cinco últimos hoyos para colocarlo en la pomada por la primera posición, una plaza que finalmente comparten en el ecuador del torneo el australiano Lucas Herbert (63 golpes, -12) y Bryson DeChambeau (66 golpes, -12). El estadounidense está cumpliendo las expectativas y arrancará la jornada del movimiento en plena disputa por la victoria, aunque para ello todavía le queda mucho trabajo.
Pero no piensen que Quirós es el único nacional en las primeras plazas. Y es que, además de Sergio García, tanto Jorge Campillo (67 golpes, -8) como Adri Arnaus (68 golpes, -8) han vuelto a bajar de los 70 golpes para situarse en estos momentos en el Top 14 -ambos con una extraordinaria parte final del recorrido-. Junto a ellos Pablo Larrazábal (66 golpes, -6) también estará en los últimos 36 hoyos al superar con nota el segundo día de competición.
No pueden decir lo mismo Adrián Otaegui (70 golpes, -2), Rafa Cabrera-Bello (68 golpes, -1), Nacho Elvira (72 golpes, Par), Gonzalo Fernández-Castaño (72 golpes, +2), Miguel Ángel Jiménez (72 golpes, +2) y José María Olazábal (74 golpes, +6), que se marchan de Dubái con las manos vacías.