Si hace unas horas les comentábamos que la inglesa Jodi Ewart Shadoff había resuelto con final feliz la historia de la pérdida de sus palos, ahora le ha toca a la americana Angel Yin. Concretamente fue en la noche del martes en Gleneagles, cuando la joven jugadora del combinado de las barras y estrellas recibió la sorpresa inesperada de ver aparecer sus palos en una gran bolsa negra, a la que no tuvo ningún problema en abrazar y besar después de todo por lo que ha pasado esta semana.
De hecho, la deportista de 20 años no ha podido practicar hasta este miércoles en el lugar donde en menos de 48 horas dará comienzo una nueva edición de la Solheim Cup: “Es cierto que no he podido todavía dar bolas, pero he estado caminando por el campo y llevando a cabo mis preparativos para, en el momento que me llegaran los palos, poder salir y jugar una ronda de prácticas como si nada hubiera pasado”, comentó Yin a los periodistas.
Ahora bien. No es oro todo lo que reluce. Y es que, como ya les informamos, además de las herramientas de trabajo a la golfista estadounidense también le perdieron la bolsa de la ropa –lo que ha provocado que tenga que pedir prestada la ropa interior a sus compañeras y se encuentre a todas horas con el vestuario que le ha proporcionado el Team USA para la cita-. Y todavía hay más. Es en esta bolsa donde se encuentra la cabeza de su driver, que separó del palo antes de proceder a empaquetarlos.
Algo tremendamente importante si tenemos en cuenta que Yin es la segunda gran pegadora de la gira en promedio –unas 282 yardas desde el tee-, algo que con un Gleneagles húmedo es especialmente importante esta semana. Lo último que escuchó la jugadora es que esta bolsa se encontraba por Londres, por lo que parece probable que, con un poco de suerte, pueda disponer de ella en unas horas.
REUNITED!!! ? @angelyinlol @SolheimCupUSA pic.twitter.com/37GLItx7gK
— Morgan Pressel (@mpressel) September 10, 2019