Pese a que la segunda jornada del Alfred Dunhill Championship no ha ido como nos hubiera gustado en un principio, lo cierto es que la Armada contará con cuatro bazas de cara a los 36 últimos hoyos que se jugarán sobre la hierba del Leopard Creek. Un gran bagaje tras el pírrico balance del primer día que cuenta con Adri Arnaus (67 golpes, -7) como principal estilete. El barcelonés, que fue uno de los pocos jugadores en entregar una cartulina bajo par el jueves, logró una de las mejores cartulinas el viernes y a estas alturas toma el relevo de Sebastián García Rodríguez (75 golpes, -1) como el mejor español.
Una extraordinaria actuación que, sin embargo, no tuvo un inicio idílico. De hecho, su primer movimiento fue un bogey en el 3. Por suerte, Arnaus no estaba dispuesto a acabar de un plumazo con el magnífico resultado de ayer y dos birdies prácticamente consecutivos en el 4 y el 6 colocaron el uno bajo par en la jornada poco antes de cometer un nuevo error en el 7. Fue en este punto cuando vivió una transformación y no volvió a cometer ni un sólo fallo en la ronda. Birdies en el 8, 9, 12, 14 y 15 y el catalán que se sitúa en la sexta plaza, a tres impactos de un podio que domina con una nueva exhibición el polaco Adrian Meronk (66 golpes, -13).
Junto a Arnaus, los otros tres españoles que han conseguido colarse en el fin de semana del torneo han sido el mencionado Sebastián García Rodríguez, el defensor del título Pablo Larrazábal (69 golpes, -1) y Adrián Otaegui (68 golpes, -1), estos dos últimos con una grandísima actuación. De hecho, el guipuzcoano -quien compartía partida con Arnaus– lo ha conseguido en los cuatro últimos hoyos gracias a dos birdies y un eagle y así colarse en pleno Top 45 junto a los mejores de estos dos últimos días.
Los que se marchan a casa antes de tiempo son Álvaro Quirós (70 golpes, +1), Nacho Elvira (78 golpes, +4), Carlos Pigem (77 golpes, +9), Gonzalo Fernández-Castaño (77 golpes, +10) y Jorge Campillo (76 golpes, +12), que no han podido alcanzar el par y se apean del evento.