
En el Ocean Course «tenemos un problema», que dirían los astronautas a la NASA, en Houston. En Kiawah Island ha llovido como ven en las imágenes, y el campo está verdaderamente pesado y lento. Teniendo en cuenta que es el recorrido más largo en la historia del US PGA (casi 7.000 metros) la bola no rodará en calle y los resultados negativos pueden ser de escándalo. Habrá que prepararse para asistir a otro ejercicio de superviviencia, de lo que se llama ya golf extremo.





