El actual número 67 del mundo utilizó la parte trasera de su cuello para romper su herramienta después de no conectar bien con la bola desde el rough y encaminarse hacia la eliminación en el BMW
Seamos honestos: desde que Darren Clarke confiara en él para formar parte del equipo europeo en la Ryder Cup de Hazeltine, Thomas Pieters ha hecho lo justo para mantenerse en los grandes circuitos. El belga, que en estas mismas fechas de hace un año ocupaba el puesto número 24 del mundo, es ahora el 67º y lo tiene en chino mandarín para que Bjorn le vuelva a tender la mano en Le Golf National. Y más aún si tenemos en cuenta este tipo de imágenes cada vez más habituales en el europeo…
Pieters volvió a cargar toda su frustración en el palo. Partió el driver tras fallar el golpe Al belga no le salió nada en Wentworth y dos rondas con 75 y 72 impactos le acabaron mandando fuera del campeonato a las primeras de cambio. Y los primeros elementos que pagaron la frustración fueron sus palos. Tras un golpe desde el rough en el par 5 del hoyo 4, Pieters tomó su hierro, se lo colocó en la parte posterior del cuello y lo partió con una facilidad pasmosa. Diríamos que nos sorprende, pero mentiríamos. Más que nada porque acumula un largo historial a sus espaldas.
Open de Francia 2017, Open Championship 2016… A nadie le gusta perder, pero ni son formas ni es el lugar adecuado.
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