El Greenbrier ha dado el pistoletazo de salida dentro del circuito más importante del mundo y ha puesto de manifiesto una cosa: aquí ganará quien más tino tenga en las inmediaciones de bandera. Porque lejos de los últimos eventos de los que hemos sido testigos en una y otra parte del mundo -nos referimos más que nada al US Open y al Abierto de Francia-, este campo ha sido diseñado para hacer pocas y los jugadores se están desquitando de lo lindo después de tanto sufrimiento en anteriores semanas.
Muestra de ello es que de los 156 jugadores que han tomado salida hasta 88 han logrado entregar una cartulina por debajo del par el campo, con hasta ocho habiendo conseguido al menos el -5. Y entre todos ellos destaca la figura de Webb Simpson (61 golpes, -9), quien ha bordado el juego para, con siete birdies y un eagle, situarse al frente de la tabla después de los primeros compases del evento.
Eso sí, no puede despistarse lo más mínimo. Y es que a solo un impacto aparece el surcoreano Whee Kim (62 golpes, -8) con una ronda en la que se ha anotado en la cartulina diez birdies y dos bogeys para adelantar en un movido turno de tarde -se suspendió durante más de una hora el juego debido a una tormenta eléctrica– al chileno Joaquín Niemann (63 golpes, -7), quien durante la mañana logró su mejor resultado desde que compite en el PGA Tour para colocarse muy cerca de los dobles dígitos.
En cuanto al LECOM Health Challenge del Web dot com buen arranque del «alicantino» Samuel del Val, que ha dejado atrás los fantasmas de las últimas actuaciones iniciales en la división de plata del circuito americano y con cinco birdies y dos bogeys se queda antre los 32 mejores del evento que se disputa en Nueva York y afrontará su segunda vuelta con garantías de continuar el fin de semana.