Menudo final de temporada está llevando a cabo Azahara Muñoz (67 golpes, 8) en la LPGA. La malagueña, que comentábamos hace 24 horas que necesitaba una vuelta de enormes proporciones para lograr algo de lo que se quedó a sólo un impacto la pasada semana, ha dado un golpe encima de la mesa para demostrar que llega con muchas ganas de disputar el evento final del curso en 15 días después de lograr una de las mejores cartulinas finales en el Toto Japan Classic para asegurarse un lugar en el Top 10 del evento.
De poco sirvió que las apuestas estuvieran en su contra y que tuviera que arriesgar para ir restándole golpes al Seta Golf Club, pues la de San Pedro de Alcántara asumió la presión con mucho gusto y con un juego con un elevado nivel de acierto ha conseguido su objetivo para colocarse a estas alturas en el puesto número 21 de la Race to CME Globe -o, lo que es lo mismo, que Azahara es la vigesimoprimera mejor deportista del mejor circuito femenino del mundo en este 2019-.
Aunque vayamos por partes para desgranar una vuelta que ha tenido grandes dosis de emoción a lo largo de las horas. Para empezar, porque hasta el hoyo 5 Azahara no interrumpió una cartulina que en esos momentos tenía la velocidad de crucero puesta anotándose un par tras otro. De hecho, este fue el punto de inflexión que le permitió a la jugadora andaluza crecer e ir a por más. Y a las pruebas nos remitimos. Birdies al 7, al 8, al 11 y al 12 que la colocaban con cinco bajo par, en esos momentos en zona de Top 10.
Sin embargo, esto no había acabado y un error en el 15 -el único en el día- puso su logro en entredicho durante unos cuantos minutos. El tiempo justo que tardó en volver a salir con un birdie bajo el brazo del par 5 del 17 y así quedarse finalmente a sólo un impacto de la sexta plaza y, eso sí, a nueve de una Ai Suzuki (67 golpes, -17) que no ha dado opción alguna a sus rivales con otra jornada con cinco birdies sin errores.
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