Hacía mucho tiempo que no veíamos un golpe tan extraño. Daniel Berger se jugaba su partido ante Mickelson en el 18 cuando su bola se fue cerca de un muro. El estadounidense calculó mal el swing y golpeó dicho muro con el palo en la bajada del swing lo que provocó un golpe al aire y que el palo saliera volando, algo muy muy extraño. Berger concedió el hoyo y el partido y con ello toda posibilidad de acceder a octavos.
A little bit of everything here:
• Club hits rock
• Club misses ball
• Club goes flying
• Match endsGolf is hard. https://t.co/DNQDdbCSEC
— PGA TOUR (@PGATOUR) 25 de marzo de 2016





