Aparte de la belleza, hay que meditar sobre lo que está detrás de este golpe. Evitar ponerse sobre el par al comienzo de la ronda, mandar un mensaje a sus rivales y darse ánimos para lo que se le venía encima
Esto no es como empieza, sino como acaba. Con este mantra salió al tee del 1 Daniel Berger, que iniciaba el domingo desde el T9 para intentar retener el título que le acredita como el auténtico rey en el FedEx St. Jude Classic. Y lo cierto es que no salió todo lo bien que hubiese querido, al menos en los compases iniciales de la vuelta.
Y es que en el par 4 del 1 hizo todo lo posible por acabar con bogey o superior… pero al final se acabó salvando. Bola al rough desde el tee, approach larguísimo a una zona donde la hierba apenas dejaba ver la pelota, chip desastroso que no encontró ni siquiera el green y, sin embargo, en su cuarto impacto fue capaz de embocar un chip certero desde casi ocho metros para salvar la papeleta. Un golpe que le dio la moral suficiente para acabar entregando cuatro birdies sin errores y hacerse con la victoria.
It’s not how you start …
it’s how you finish. ? pic.twitter.com/X2LhvZSJHS
— PGA TOUR (@PGATOUR) 12 de junio de 2017
