Tras muchas fotos, muchas entrevistas y un sinfín de apariciones en los medios toca trabajar. Thomas Bjorn, flamante nuevo capitán del equipo europeo para la Ryder Cup del 2018 en París ya ha anunciado que se pondrá manos a la obra cuanto antes para atender las sugerencias de una capitanía que, según sus propias palabras, se basará en la “honradez y la sinceridad”. Y lo primero a lo que quiere meter mano es a los criterios de participación para los jugadores europeos, algo que ya criticó en su día el norirlandés Rory McIlroy.
Todos recordarán la problemática que surgió hace un par de meses con el inglés Paul Casey que, pese a gozar de un estado de forma envidiable, no pudo ser partícipe del #TeamEurope de Darren Clarke debido a que no contaba con la membresía del circuito europeo. Pues bien, esta norma podría tener los días contados a tenor de lo expresado por el danés en una reciente entrevista concedida a Press Association Sport. En esta, el deportista nórdico confirmó que “los criterios serán revisados, porque el golf es un deporte que está en continuo movimiento”. Aunque, eso sí, “todo tendrá que ser analizado minuciosamente y no se llevará a cabo de forma inmediata”.
¿Significa eso que podría darse la circunstancia de ver al vizcaíno Jon Rahm sobre la hierba de Le Golf National en un par de años? Atendiendo a las palabras del escandinavo, sí. Pero no lancemos las campanas al vuelo todavía. Bjorn no quiere acabar de raíz con un sistema que le ha hecho ganar a Europa ocho de las últimas once ediciones. “Somos los dominadores de este siglo y hemos de tener en cuenta que siempre jugamos contra equipos muy fuertes”. Así pues, tendremos que esperar acontecimientos.