Quizá no sea ni el más simpático ni el compañero preferido por el resto de jugadores del PGA Tour, pero lo que hay que reconocerle a Bubba Watson es que siempre está ahí cuando lo demás lo necesitan. Lo demostró hace un par de años donando un cuarto de millón de dólares para paliar los daños causados por la naturaleza en el Greenbrier Resort -y que obligaron a suspender el evento- y ha vuelto a dar cuenta de esta generosidad hace unas horas después de donar el premio conseguido gracias a su última victoria en el circuito norteamericano.
Así es como lo ha recogido la propia organización del Travelers a través de un comunicado, dando las gracias al jugador zurdo por hacer entrega de 1,26 millones de dólares a The Hole in the Wall Gang Camp, una organización con sede en Connecticut y fundada por el actor Paul Newman centrada en la ayuda a niños gravemente enfermos y a sus familias. Una enorme acción a la que le viene aparejada la alegría de poder contar que Travelers ya ha donado más de dos millones de dólares en el presente año para mejorar la vida de los más pequeños.
Puede ser que no sea el compañero más amable del mundo –en una encuesta realizada hace un tiempo por ESPN Bubba ocupó el último puesto en cuando a jugadores a los que tendrían menos posibilidades de ayudar en una pelea-, pero lo que no se le puede poner en duda es su compromiso para cualquier tipo de causa social -su campaña “drive to a million” acumula ya más de 1,3 millones de dólares desde su puesta en marcha en 2013, colaborando también con “the first tee”-. Una clasificación en la que a buen seguro ocuparía un enorme Top 10.
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