Bradley, que venía de un doblebogey en la anterior bandera, tuvo que enfrentarse unos minutos después a este disparo de su compañero
Ocurrió durante la disputa del hoyo 14 en el partido estelar de este domingo. Tras el doloroso doblebogey de Keegan Bradley sólo unos minutos antes en el par 3 del 13, KG necesitaba algo extraordinario para no perder de vista a su compañero en los últimos cinco hoyos de la prueba. Y lo que encontró, sin embargo, fue la puntilla de Sam Burns, que consiguió un dardo desde 79 yardas para dejar la bola a unos pocos centímetros del agujero. Un birdie que lo situaba con tres arriba a falta de los cuatro últimos hoyos y que sentenciaba el campeonato.





