Llevó a cabo la mejor ronda de la primera jornada del RBC Heritage después de firmar un 62 con nueve birdies sin errores y, por si no se había quedado satisfecho con ello, fue capaz incluso de conseguir el Golpe del Día con un disparo de muchísima calidad en la decimoséptima bandera. En ella, el deportista australiano se pasó el green y llevó la bola al bunker de detrás, a unos trece metros de la bandera. Fue entonces cuando se hizo la magia y con un toque sutil acabó alojando el esférico al fondo de la bandera ante los aplausos de los aficionados, que asistieron a una de las grandes exhibiciones de lo que llevamos de año.