Si bien es cierto que no contamos esta semana en el torneo del DP World Tour con la presencia de Pablo Larrazábal, último ganador en la gira europea, la Armada ha llegado a este Italian Open con ganas renovadas para hacerse con un nuevo triunfo en este espectacular año. Y a las pruebas nos remitimos en virtud de lo visto este jueves sobre la hierba del Marco Simone romano, lugar donde en apenas cuatro meses viviremos una nueva edición de la Ryder Cup entre Europa y Estados Unidos.
Hasta tres jugadores patrios han conseguido colarse en el Top 10 del evento después de los primeros 18 hoyos con Jorge Campillo (67 golpes, -4) como faro que alumbra al resto. Y es que el cacereño, que viene de conseguir un grandísimo tercer lugar en el Korea Championship, ha arrancado por todo lo alto con una vuelta en la que los aciertos de los doce primeros hoyos le ganaron la partida a los errores vividos durante el último tercio de jornada. Seis birdies y dos bogeys permiten al extremeño colarse en estos momentos en el Top 5, solo un golpe por detrás de un podio que domina el galo Matthieu Pavon (63 golpes, -8).
Pero las noticias positivas no cesan aquí, pues tanto Santi Tarrío (68 golpes, -3) como Adrián Otaegui (68 golpes, -3) se han hecho hueco con todo merecimiento en la zona noble de la clasificación. Mientras que el gallego lo ha conseguido gracias a seis aciertos y tres errores, el guipuzcoano ha vivido un día sin sobresaltos con tres birdies sin fallos para plantearse un viernes en el que el ataque al podio no es descabellado.
Junto a ellos, el acceso a las dos últimas rondas lo completarían el grancanario Rafa Cabrera Bello (71 golpes, Par), que se sitúa en el Top 41, y Gonzalo Fernández-Castaño (72 golpes, +1), que busca mantener su idilio con este campeonato.
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