«De mil bolas sacadas de ese bunker no metería ni una», dijo Jorge Campillo. Pero la metió, para ‘birdie’ en el hoyo 18 del RCG de Sevilla y para acabar segundo a un golpe del estadounidense Shaun Micheel (67), de 43 años y primer líder del torneo.
Campillo está dispuesto a que 2012 sea su año. Atrapó tarjeta del Tour, fue segundo en Nueva Delhi (300.000 euros de premio) y hoy se libró de ‘bogeys’ en un maldito día para jugar al golf: lluvia, viento y ‘rough’ espeso hasta los tobillos.
Pese al ‘rough’ (10 centímetros) el protagonista final fue un ‘bunker’, uno de los que arropan el ‘green’ del precioso 18. Desde dentro, Campillo la sacó, la bola rodó y acabó en el agujero. Un ‘birdie’ que valió una segunda plaza con 68 golpes (-4) compartida con los ingleses Robert Rock (ganó en Dubai) y Danny Willett, a uno de un renacido Micheel.
Shaun Micheel va camino de pasar a la historia del golf como el jugador que acabará su carrera con un solo título, pero qué título: en 2003 rompió los pronósticos en el último Grande de la temporada, el US PGA, y se lo llevó a casa, a Memphis. En Sevilla, el americano se ha reencontrado con su mejor pasado.
Rafa Cabrera-Bello (-2) y Pablo Larrazábal (-1) son junto a Campillo los únicos españoles bajo el par. Sólo 21 ganaron al campo, seis durante la terrible mañana en el campo hispalnse.
Álvaro Quirós (+1), José Mari Olazábal (+3) y Jiménez (+3) se ahogaron entre el agua, el viento y el ‘rough’. Toca remontar.