Empezó muy bien, con un birdie en su tercera bandera del día, pero el paso de las horas fue perjudicial para Jorge Campillo (72 golpes, 11), quien acabó entregando la cuchara y se bajó de la segunda plaza que ocupaba hasta la jornada de ayer. La clarividencia en los greenes desapareció lo que, unido al gran acierto de sus rivales en lo alto de la clasificación, favoreció que ni siquiera el par le sirviera para evitar caer hasta el Top 17. Desde este puesto la zona noble se escapa a dos impactos y el liderato suena más a quimera que a realidad, con Pieters (67 golpes, -17) y Fisher (65 golpes, -17) a seis golpes.
Si el viernes el cacereño sorprendió a propios y extraños con una vuelta excelsa con ocho birdies sin fallos que le valió aparecer en la jornada del movimiento en el partido del día, la ronda sabatina le ha alejado del sueño de pelear por el triunfo. Empezó bien, pero los dos bogeys consecutivos en el 5 y el 6 le pararon en seco. Poco importó que el par 5 del 8 le devolviera al par, pues un nuevo bogey en el 9 le puso de nuevo con los pies en la tierra.
Los segundos nueve hoyos los cerró con un birdie y ocho pares, evitando acabar por encima del par pero quedándose lejos de los mejores de este Abu Dhabi HSBC Championship. Eso sí, en cuanto a números el extremeño es el mejor español con mucha diferencia sobre el campo. Y es que Carlos Pigem (72 golpes, -5), el siguiente en la tabla, se sitúa en el T44 tras una vuelta al par.
Adrián Otaegui (73 golpes, -4), Álvaro Quirós (71 golpes, -3), Alejandro Cañizares (71 golpes, -3) y Rafa Cabrera-Bello (73 golpes, -1) completaron la actuación de los nuestros en un día donde solo el andaluz y el madrileño finalizaron por debajo del par.